Calidad de Vida, indicadores y componentes

El concepto de Calidad de Vida, es complejo y de difícil definición operativa. La Calidad de Vida, como decía Campbell (Campbell 1976) “es una entidad vaga y etérea, algunas cosas sobre las que muchas personas hablan, pero de las que nadie sabe muy claramente qué hacer con ellas”. En cualquier caso, se ha definido como un constructo que expresa una valoración subjetiva del grado en que se ha alcanzado la satisfacción vital; o como el nivel de bienestar personal percibido. Ciertamente, la mayoría de los autores consideran que esta valoración subjetiva está estrechamente relacionada con indicadores “objetivos” biológicos, psicológicos, y sociales. Y que forman parte del constructo (Blanco, 1985; Chibnall y Tait, 1990; Diener, 1984; De Haes, 1988).

Así pues, la calidad de vida se traduce en términos de presencia o ausencia de satisfacción vital subjetiva. Y de presencia o ausencia de indicadores estándar. Objetivos de lo que en general las personas consideran que determina una “buena vida”. Condiciones que, habitualmente necesarias, aunque no suficientes para la citada valoración subjetiva.

Reconocer ambos elementos supone no solo aceptar la presencia de indicadores objetivos del bienestar; sino también de indicadores subjetivos y aceptar igualmente que la Calidad de Vida consiste. Básicamente en un sentimiento de satisfacción, un estado de ánimo positivo. Viene determinado por factores biológicos, psicológicos y sociales, incluyendo factores complejos, como la salud misma. Es decir, ese sentimiento positivo de satisfacción global respecto de la vida; está determinado por la valoración del sujeto y por la presencia de condiciones externas objetivas.

Definición de calidad de vida

La Calidad de Vida es un concepto amplio y multifacético que abarca diversos aspectos de la vida de las personas y las sociedades. Se relaciona con niveles de generalización que van desde lo individual hasta lo comunitario. Incluye aspectos físicos, mentales, económicos y sociales, que influyen en la percepción de bienestar y satisfacción de los individuos.

Concepto amplio y multifacético

  • Engloba distintas dimensiones de la vida diaria.
  • Incluye tanto aspectos materiales como emocionales.
  • Se vincula con la percepción subjetiva de la Calidad de Vida individual y colectiva.

Niveles de generalización

  • Desde la experiencia personal hasta la realidad social.
  • Considera el impacto en el bienestar individual y la Calidad de Vida de la comunidad.
  • Aborda la interacción entre los diferentes niveles de generalización en la evaluación de la Calidad de Vida.

Aspectos físicos, mentales, económicos y sociales

  • Incluye la salud física y mental como elementos fundamentales.
  • Considera el bienestar económico y la estabilidad financiera.
  • Se relaciona con la calidad de las interacciones sociales y la cohesión comunitaria.

Indicadores de Calidad de Vida

Los indicadores objetivos de Calidad de Vida son fundamentalmente el nivel socioeconómico, de apoyo social y de salud; aunque sin duda, asumir la definición de salud de la OMS (situación de óptimo bienestar físico, psicológico y social) hace confusa su distinción con el concepto de Calidad de Vida. (Diener, 1984; Bryant y Veroff, 1982; Barriga, 1988). Por lo que se refiere al nivel socioeconómico. Sus dos elementos de la Calidad de Vida centrales son el estatus de empleo y los ingresos (además, naturalmente de la naturaleza y cuantía de las posesiones materiales).

En cuanto al empleo, algunos autores han encontrado que es un indicador de bienestar y Calidad de Vida, esto debido a que las personas que no están laborando tienen un nivel muy debajo de bienestar subjetivo; incluso cuando se controlan las diferencias por nivel de ingresos con grupos de personas con empleo. Por lo tanto, el desempleo tiene un impacto muy negativo sobre el bienestar subjetivo, que va más allá de las dificultades económicas que obviamente conlleva (Blanch, 1990). De igual forma, la satisfacción laboral parece estar positivamente relacionada con el bienestar subjetivo, pero el conflicto y la tensión laborales aparecen negativamente relacionados con el bienestar subjetivo.

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Además, la mayoría de los estudios sobre el tema indican que hay una relación positiva entre el nivel de ingresos y el nivel de Calidad de Vida, aunque la correlación no sea significativa. Algunas hipótesis al respecto, señalan que el nivel de ingresos tiene un efecto solo en niveles bajos de pobreza, pero, una vez se han cubierto las necesidades básicas, los ingresos dejan de tener una influencia importante.

Variables consideradas

  • Esperanza de vida al nacer.
  • Nivel educativo.
  • Producto Interno Bruto per cápita.

Relación con las condiciones de vida

El IDH establece una relación directa entre la esperanza de vida, la educación y el nivel de ingresos de una población con su Calidad de Vida. Países con un IDH alto suelen contar con mejores condiciones de vida para sus habitantes, que se reflejan en aspectos como la accesibilidad a servicios básicos, la igualdad de oportunidades y el desarrollo personal y social.

Componentes de la Calidad de Vida

Componente socioeconómico

Por otra parte, los mismos estudios indican que factores tales como el estatus social y el poder, pueden ser responsables del efecto de los ingresos sobre el bienestar subjetivo. Igualmente, una explicación relacionada consiste en que el efecto de los recursos económicos es directo, pero depende de la comparación social. Igualmente, el nivel de ingresos debe corresponderse con el poder adquisitivo.

Del mismo modo, dentro del componente socioeconómico debemos incluir “condiciones externas objetivas” como el tipo de vivienda, sus elementos de comodidad y seguridad de ocupación (propiedad), coste del alojamiento, entre otros.

El segundo de los componentes relevantes de la Calidad de Vida es el apoyo social, el cual puede considerarse como un elemento objetivo y a la vez subjetivo de la Calidad de Vida (Rodríguez-Marín et al., 1993; 2003a; 2003b; Schwarzer y Knoll, 2007; Terol, 1993; Terol et al., 2000; Wortman, 1984). Dentro del marco del apoyo social debe ser considerada como una condición objetiva la interacción social (Diener, 1984).

Ciertamente, la interacción social hace referencia a la red social que la persona dispone (la cantidad, tipo y calidad de los contactos sociales) y al uso de esa red (número de contactos sociales que la persona tiene en una unidad de tiempo). Ambas cosas dependen tanto de su propia conducta como de la oferta de la comunidad en la que se encuentra inserto.

Componente de Apoyo social

Otra de las variables objetivas, que ha de considerarse relacionada con apoyo social, es la disponibilidad de servicios que existe en la oferta de la comunidad para la persona. De hecho, la sociedad posindustrial ha transformado en servicios sociales públicos, una gran mayoría de acciones de ayuda, que antaño asumía la familia, convirtiéndose en uno de los principales distintivos del estado social de bienestar, en donde son importantes factores como accesibilidad y calidad de los servicios sanitarios, comerciales, de educación, de ocio, etc., calidad y seguridad de los transportes, accesibilidad y calidad de los servicios de protección y seguridad (García Durán y Puig, 1980; Blanco y Chacón, 1985).

Además, la interacción social más potente se produce entre los miembros de la pareja y los de la familia. Por esto, hay un amplio número de estudios que han encontrado que las personas casadas informan de un bienestar subjetivo mayor que cualquier categoría de personas no casadas.

Algunos de los mismos estudios encontraron que el matrimonio era el predictor más potente del bienestar subjetivo, incluso cuando se controlaba el efecto del nivel educativo, de ingresos y estatus ocupacional. Además, cuando, se pasa del hecho objetivo del matrimonio a la importancia de la satisfacción marital y su impacto con la felicidad global, la conclusión es que la satisfacción con el matrimonio y con la vida familiar es uno de los predictores más importantes del bienestar subjetivo.

El apoyo social, además, tiene también una vertiente subjetiva, puesto que independientemente de cuán potente sea la red social disponible, se puede percibir como no disponible, innecesaria y en algunos casos, contraproducente.

Componente Salud

Finalmente, el tercero de los más relevantes componentes de la Calidad de Vida lo constituye el estado de salud. Aquí nos encontramos también ante un indicador mixto, puesto que si bien, existen indicadores de Calidad de Vida objetivos de orden biológico, tan valiosos como ellos son los indicadores subjetivos, que se manifiestan mediante informe de las propias personas. Por otro lado, no podemos dejar de considerar la fuerte interacción que se da entre salud y Calidad de Vida.

Si el estado de salud es un factor determinante de la calidad de vida, esta se determina igualmente en el estado de salud de la persona. Quizás eso hace parte del significado de la definición de salud de la OMS. De hecho, esa definición nos presenta un concepto de salud muy similar al de calidad de vida: “estado de completo bienestar físico, psíquico y social, y no meramente la ausencia de enfermedad”.

Hay un número relevante de estudios que han demostrado una relación considerable entre los autoinformes de salud y el bienestar subjetivo. Otros estudios han encontrado que la salud es considerada por las personas como el factor más importante de la “felicidad”. En ellos, la satisfacción con la salud es uno de los predictores más fuertes de la satisfacción vital, parece que la valoración subjetiva de la salud tiene una relación más fuerte con el bienestar subjetivo que la valoración objetiva.

Medición de la Calidad de Vida

La evaluación de la Calidad de Vida implica considerar múltiples áreas que reflejen la situación general de bienestar de un individuo. A través de diversos indicadores, es posible obtener una visión integral de aspectos clave en la vida de las personas.

Evaluación a través de diferentes áreas

  • Salud física y mental.
  • Bienestar emocional.
  • Estabilidad económica.
  • Relaciones sociales.

Percepción individual sobre la situación de vida

La manera en que cada persona percibe su propia Calidad de Vida juega un papel fundamental en su bienestar general. La autoevaluación de aspectos como la felicidad, la satisfacción personal y el cumplimiento de metas influyen en esta percepción individual.

Medidas para evaluar la calidad de vida

  • Índices de incapacidad funcional.
  • Mediciones de bienestar psicológico.
  • Estudios de salud social.
  • Valoración del nivel de dolor.

Factores influyentes en la calidad de vida

Los factores que influyen en la calidad de vida son significativos para el bienestar general de las personas. Aspectos como la salud física y la estabilidad económica desempeñan un papel crucial en la percepción de Calidad de Vida.

Salud física y estabilidad económica

  • El mantenimiento de una buena salud física es esencial para disfrutar de una buena Calidad de Vida.
  • Contar con estabilidad económica permite cubrir las necesidades básicas y acceder a servicios de salud de calidad.
  • La ausencia de enfermedades crónicas y la capacidad de hacer frente a imprevistos financieros contribuyen significativamente al bienestar general.

Importancia de la educación y las relaciones sociales

  • La educación brinda oportunidades de crecimiento personal y desarrollo profesional, impactando positivamente en la Calidad de Vida.
  • Las relaciones sociales sólidas y enriquecedoras promueven el bienestar emocional y la sensación de pertenencia a la comunidad.
  • La interacción social y el apoyo emocional son clave para afrontar los desafíos diarios y mejorar la Calidad de Vida.

Equilibrio entre la vida y el trabajo

  • Mantener un equilibrio entre la vida personal y laboral favorece la salud mental y emocional, reduciendo el estrés y la ansiedad.
  • Dedicar tiempo a actividades recreativas y de descanso es fundamental para recargar energías y disfrutar de una vida plena.
  • La satisfacción laboral y la posibilidad de desarrollo profesional contribuyen de manera significativa al bienestar en general.

La calidad de vida en el ámbito individual

En el ámbito individual, la Calidad de Vida se relaciona estrechamente con el bienestar personal, los logros alcanzados y la salud en general. Es un concepto que abarca la percepción de cómo nos sentimos con respecto a nuestra vida en todos sus aspectos.

Relación con el bienestar, logros personales y salud

  • El bienestar personal es crucial para la Calidad de Vida, incluyendo aspectos emocionales, mentales y físicos.
  • Los logros personales, tanto a nivel profesional como personal, contribuyen a una mayor satisfacción y bienestar.
  • La salud juega un papel relevante en la Calidad de Vida, abarcando tanto la salud física como la salud mental. Mantener un equilibrio en ambos aspectos es esencial para una buena calidad de vida.

Impacto del entorno social y cultural

  • El entorno social en el que nos desenvolvemos puede influir significativamente en nuestra Calidad de Vida. Las relaciones sociales positivas y el apoyo emocional son clave para el bienestar individual.
  • La cultura en la que estamos inmersos también tiene un impacto en nuestra Calidad de Vida, ya que determina nuestras creencias, valores y prácticas que pueden afectar nuestro bienestar general.

Proceso de evolución constante

La Calidad de Vida en el ámbito individual es dinámica y está en constante evolución. A lo largo de la vida, nuestras necesidades, metas y valores cambian, lo que requiere una adaptación continua para mantener un buen equilibrio y satisfacción en todos los aspectos de nuestra vida.

Mejora de la Calidad de Vida

La mejora de la Calidad de Vida implica llevar a cabo cambios significativos en los estilos de vida y promover el bienestar social. Estos factores son fundamentales para elevar el nivel de vida de la población y generar un impacto positivo en el bienestar general de la sociedad.

Cambios en estilos de vida y bienestar social

  • Implementar hábitos saludables como la alimentación balanceada y la actividad física regular.
  • Fomentar la participación en actividades comunitarias que promuevan la integración y el apoyo mutuo.
  • Incentivar la comunicación abierta y el fortalecimiento de relaciones interpersonales para crear entornos sociales saludables.

Nivel de vida de la población

  • Garantizar el acceso equitativo a servicios básicos como la salud, la educación y la vivienda.
  • Promover oportunidades de empleo dignas y bien remuneradas que contribuyan al bienestar económico de los individuos.
  • Impulsar políticas públicas que favorezcan la igualdad de oportunidades y reduzcan las brechas socioeconómicas.

Influencia de factores socioeconómicos y culturales

  • Crear programas de apoyo social que atiendan las necesidades de grupos vulnerables y promuevan la inclusión social.
  • Valorar y respetar la diversidad cultural, reconociendo la importancia de las tradiciones y costumbres en el bienestar de las comunidades.
  • Impulsar la educación y la formación continua como herramientas para el desarrollo personal y profesional, generando oportunidades de crecimiento y mejora continua.

Barriga, S. (1988). Los indicadores del bienestar. En J. Rodríguez-Marín (Comp.), Aspectos Psicosociales de la Salud y de la comunidad. Barcelona: PPU. 175-190.

Blanch, J.M. (1990). Del viejo al nuevo paro: un análisis psicológico y social. Barcelona: Promociones y Publicaciones Universitarias S.A.

Blanco, A. (1985). La calidad de vida: supuestos psicosociales. En J.F. Morales, A. Blanco, C. Huici y J.M. Fernández (Eds.), Psicología Social Aplicada. Bilbao: Desclée de Brouwer.

Blanco, A. y Chacón, F. (1985): La evaluación de la calidad de vida. En J.F. Morales, A. Blanco, C. Huici y J.M. Fernández (Eds.), Psicología Social Aplicada. Bilbao: Desclée de Brouwer.

Bryant, F.B. y Veroff, J. (1982). The structure of psychological well-being. Journal of Personality and Social Psychology, 43(4), 653-673.

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De Haes, J.C.J.M. (1988). Quality of life: Conceptual and Theoretical Considerations. En M. Watson, S. Greer y C. Thomas (Eds.), Psychosocial Oncology. Oxford: Pergamon Press.

Diener, E. (1984). Subjective well-being. Psychological Bulletin, 95(3), 542-575.

García-Durán, J. y Puig, P. (1980). La calidad de vida en España. Madrid: Moneda y Crédito.

Ramírez-Coronel, A. A., Malo-Larrea, A., Martínez-Suarez, P. C., Montánchez-Torres, M. L., Torracchi-Carrasco, E., & González-León, F. M. (2020). Origen, evolución e investigaciones sobre la Calidad de Vida: Revisión Sistemática. Archivos venezolanos de farmacología y terapéutica39(8), 954-959.

Rodríguez-Marín, J. (1993). Calidad de vida en enfermos crónicos: definición y evaluación. En V, Pelechano (ed.), Psicología, Mitopsicología y postpsicología. Valencia: Alfaplus.

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Wortman, C.B. (1984). Social support and cancer: Conceptual and methodologic issues. Cancer, 53, 2339-2359.

Autor(es)

Jesús Rodríguez Marín

Jesús Rodríguez Marín

Universidad Miguel Hernández de Elche, España

Google ScholarGoogle Académico

Jesús Rodríguez Marín es Catedrático Emérito de Psicología de la Salud en la Universidad «Miguel Hernández» de Elche y un distinguido Facultativo Especialista en Psicología Clínica. Posee una amplia formación académica, incluyendo una Licenciatura en Filosofía y un Doctorado en Filosofía por la Universidad de Valencia, así como una Licenciatura en Psicología por la Universidad de Murcia. Además, es Diplomado Internacional en Psicología de la Salud y ha completado un programa en Alta Dirección Universitaria en la Universitat Politécnica de Catalunya y la Universidad Antonio de Nebrija.

El Profesor Rodríguez Marín ha ocupado numerosos puestos de relevancia a lo largo de su carrera. Ha sido Rector Honorario de la Universidad Miguel Hernández de Elche y Presidente de la Sociedad Española de Psicología de la Salud. Actualmente, es Investigador Emérito y secretario de la Comisión de Investigación del Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (ISABIAL). También es Académico Correspondiente de la Real Academia de Medicina de la Comunidad Valenciana y Académico de Número de la Academia de Psicología de España, donde dirige su Biblioteca y es miembro de su Junta de Gobierno.

Ha desempeñado roles clave en la dirección y edición de publicaciones académicas, siendo el Director Fundador y Editor Asociado de la Revista de Psicología de la Salud. Su trabajo académico incluye la publicación de 8 libros, 53 capítulos de libros y 240 artículos científicos, y ha dirigido 24 tesis doctorales.

Sus líneas de investigación se centran en el afrontamiento de la enfermedad, el ajuste psicosocial, la calidad de vida y el crecimiento personal en enfermos físicos crónicos y discapacitados. También ha investigado el impacto del estrés hospitalario y la intervención psicológica en pacientes con diversas condiciones, incluyendo fibromialgia, obesidad y aquellos sometidos a trasplantes renales y hepáticos. Además, ha explorado temas como el suicidio juvenil, el estrés laboral y el Burnout en profesionales sanitarios, así como la calidad de los servicios sanitarios y la satisfacción del paciente.

Por su destacada trayectoria, ha recibido el Premio Nacional José Luis Pinillos a la Excelencia e Innovación en Psicología en la edición de 2020.

Jesús Rodríguez Marín ha sido Profesor visitante en prestigiosas universidades como la Universidad de California, Los Ángeles (EEUU), Exeter (GB) y Sheffield (GB), y ha formado parte del Comité Ejecutivo de la European Society of Health Psychology y de la European Federation of Professional Psychologists Associations.

José Antonio García del Castillo Rodríguez

José Antonio García del Castillo Rodríguez

Universidad Miguel Hernández de Elche, España

Google ScholarGoogle Académico

José Antonio García del Castillo Rodríguez es Doctor en Psicología por la Universidad de Murcia y Catedrático de Escuela Universitaria de Psicología Social en la Universidad Miguel Hernández de Elche. Actualmente, forma parte del Departamento de Psicología de la Salud en la Facultad de Medicina y es el fundador y director del Instituto de Investigación de Drogodependencias (INID) de la Universidad Miguel Hernández.

Desde 1996, ha sido asesor técnico en materia de drogas del Gobierno Valenciano y, desde 1998, vocal representante de la Universidad Miguel Hernández en el Consejo Asesor de la Generalitat Valenciana en materia de Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos. Además, es miembro del Comité Técnico de Prevención de las Drogodependencias de la Conselleria de Bienestar Social de la Generalitat Valenciana desde el año 2000 y del Comité Técnico de Profesionales de la Prevención del Consejo Asesor del Observatorio Español de las Drogas y las Toxicomanías del Plan Nacional sobre Drogas de España.

El Dr. García del Castillo Rodríguez es licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación, sección Psicología, por la Universidad de Murcia, donde también obtuvo su Grado de Licenciatura y Doctorado en Psicología con la máxima calificación «cum laude». Es especialista en Psicología Clínica por el Ministerio de Educación y Ciencia y ha recibido múltiples evaluaciones favorables en sus tramos docentes a lo largo de su carrera.

En el ámbito editorial, ha sido jefe de redacción y miembro de diversos consejos de redacción en revistas científicas, actualmente dirige la revista «Salud y Drogas». Ha participado en numerosos proyectos de investigación y ha publicado ampliamente sobre la prevención de drogas en diferentes contextos, incluyendo la escuela, la familia y la comunidad. Entre sus obras más destacadas se encuentran «Prevención primaria de drogodependencias en la escuela: teoría y método» y «Tratado sobre prevención de las drogodependencias».

El Dr. García del Castillo Rodríguez ha sido galardonado con varios premios de investigación a nivel nacional y es miembro activo de diversas sociedades científicas, como la Sociedad Científica Española de Estudios sobre el Alcohol, el Alcoholismo y otras Toxicomanías (Socidrogalcohol) y la European Society for Prevention Research.

Su labor se extiende también a la dirección de grupos de investigación, como el consolidado «Análisis e intervención psicológica en la prevención de conductas de riesgo para la salud» (Prevengo) de la Universidad Miguel Hernández. Su pasión y compromiso con la prevención y el tratamiento de las drogodependencias han marcado significativamente su carrera y contribuyen a su prestigio en el campo de la psicología y la salud pública.

María Carmen Terol

Universidad Miguel Hernández de Elche, España

Citar este artículo:

Rodríguez, J., García, J., Terol, M. (9 de febrero de 2018). Calidad de Vida, indicadores y componentes. Instituto Salamanca. https://institutosalamanca.com/blog/calidad-de-vida-indicadores-y-componentes

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